Mi ventana se llenó de estrellas
brillantes gotas de lluvia
entre las que veía mecerse
ceremoniosas las altas arizónicas,
desapacible tiempo de espera
agitadas ramas
bien mio
cosa pequeña.
¿dónde estás?



Rincón de sombras
en las que me muevo
como viejo pigmalión
que buscase rastros de su obra
entre los escombro del tiempo.